Rosie Driscoll, Coord. Middle y High School Formación de Fe
El domingo pasado, en la Fiesta de Pentecostes, mas de 120 adolescentes Candidatos de Confirmación exhibieron sus Proyectos de Pentecostes para los feligreses y visitantes a El Buen Pastor. Si no tuvo oportunidad de ver la exhibición, tal vez se pregunte, “¿Qué es el Proyecto de Pentecostes?”
El Proyecto de Pentecostes es uno de los requisitos en el programa de preparación para la Confirmación de los jóvenes de Middle y High School. El Proyecto consiste de 2 elementos:
Aunque pedimos un número mínimo de horas que cada Candidato debe dedicar a su proyecto de servicio, el Proyecto de Pentecostes está diseñado para eliminar la terminología de “horas de servicio” tan prevalente en la cultura secular y en la cultura católica. Este lenguaje de “horas de servicio” corre el riesgo de comunicarles a nuestros jóvenes que el servicio es un número finito para alcanzar en vez de una vida de fe para vivir. En vez de este lenguaje moderno de números y estadísticas, queremos que nuestros jóvenes entiendan el lenguaje de Jesús, quien nos enseñó lo que es ser su discípulo.
Pues en el día de Pentecostes los discípulos recibieron el Espíritu Santo para ayudarlos a superar sus miedos y cumplir la misión que Jesús les había encomendado: “Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones” (Mateo 28:19). En el sacramento de la Confirmación, los dones del Espíritu Santo que recibimos en el Bautismo se fortalecen en nosotros para ayudarnos a predicar la Buena Nueva en nuestro mundo y ser testigos de nuestra fe.
¿Qué significa predicar la Buena Nueva, seamos adolescentes o adultos? Papa Francisco lo explica hermosamente: “Cuando acogemos al Espíritu Santo en nuestros corazones y permitimos que actúe, Cristo se hace presente en nosotros y toma forma en nuestras vidas; a través de nosotros, será el – Cristo mismo – quien ora, perdona, da esperanza y consolación, sirve al prójimo, se acerca a los necesitados, crea comunidad y siembra la paz” (Audiencia General, 29 de enero, 2014).
Así como los discípulos fueron literalmente inspirados – llenados con el Espíritu – para salir y ser Cristo para los demás, nuestros jóvenes Candidatos de Confirmación han sido inspirados para ser las manos y los pies de Jesús en sus familias, su parroquia, y en su comunidad. ¡Estamos agradecidos a ellos por ser inspiración para todos nosotros con su testimonio!
El Proyecto de Pentecostes es uno de los requisitos en el programa de preparación para la Confirmación de los jóvenes de Middle y High School. El Proyecto consiste de 2 elementos:
- Servicio a la comunidad en una área determinada de necesidad por un mínimo de 10 horas
- La creación de un cartel que incluye una reflexión escrita, un verso de la Biblia, y un imagen visual relacionado a la experiencia de servicio
Aunque pedimos un número mínimo de horas que cada Candidato debe dedicar a su proyecto de servicio, el Proyecto de Pentecostes está diseñado para eliminar la terminología de “horas de servicio” tan prevalente en la cultura secular y en la cultura católica. Este lenguaje de “horas de servicio” corre el riesgo de comunicarles a nuestros jóvenes que el servicio es un número finito para alcanzar en vez de una vida de fe para vivir. En vez de este lenguaje moderno de números y estadísticas, queremos que nuestros jóvenes entiendan el lenguaje de Jesús, quien nos enseñó lo que es ser su discípulo.
Pues en el día de Pentecostes los discípulos recibieron el Espíritu Santo para ayudarlos a superar sus miedos y cumplir la misión que Jesús les había encomendado: “Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones” (Mateo 28:19). En el sacramento de la Confirmación, los dones del Espíritu Santo que recibimos en el Bautismo se fortalecen en nosotros para ayudarnos a predicar la Buena Nueva en nuestro mundo y ser testigos de nuestra fe.
¿Qué significa predicar la Buena Nueva, seamos adolescentes o adultos? Papa Francisco lo explica hermosamente: “Cuando acogemos al Espíritu Santo en nuestros corazones y permitimos que actúe, Cristo se hace presente en nosotros y toma forma en nuestras vidas; a través de nosotros, será el – Cristo mismo – quien ora, perdona, da esperanza y consolación, sirve al prójimo, se acerca a los necesitados, crea comunidad y siembra la paz” (Audiencia General, 29 de enero, 2014).
Así como los discípulos fueron literalmente inspirados – llenados con el Espíritu – para salir y ser Cristo para los demás, nuestros jóvenes Candidatos de Confirmación han sido inspirados para ser las manos y los pies de Jesús en sus familias, su parroquia, y en su comunidad. ¡Estamos agradecidos a ellos por ser inspiración para todos nosotros con su testimonio!